No parece que hayan gustado los coqueteos con el Barcelona camiseta mexico de este verano. Arnold puso un buen centro desde el pico del área que buscaba la cabeza de L. Díaz. Y ya no se trata del fenómeno influencer (no hay que ser simplistas y culparlos de todos los males en las redes), sino de los patrones de socialización, generación de contenido y éxito que se han propagado en línea: para ser popular, hay que dar novedad constante, y en materia estética, la vía más veloz y sencilla para conseguirlo es a través de mostrar ropa nueva cada poco tiempo.