Un descubrimiento que no puedes dejar escapar si eres una de esas personas que le gusta hacer ejercicio. Pascal no tiene dudas de que el secreto de su efervescente éxito se debe a la visibilidad que le han dado las estrellas que todos, hasta él mismo, admiran. El alemán recibió en la frontal, vio cinco hombres delante y, en lugar de buscar la rendija, se la colocó para la diestra y soltó un latigazo que no ha salido lejos de la portería.