Valenciana de nacimiento, comenzó su carrera en la moda sin formación (aprendió de manera autodidacta) y trabajando en talleres de otros hasta que, en el año 2006, decidió establecerse por su propia cuenta y fundar la firma de novias que lleva su nombre, un imprescindible en el circuito de las novias de la capital. Atienden en un coqueto estudio ubicado en Aracava, a las afueras de Madrid, de donde brotan trajes sencillos con toques espectaculares que siempre traspasan la barrera digital y se extienden por las redes sociales.